Lo de los Teutones “cabezas cuadradas” lo esperaba uno. Lo de los Britones “Pint Drinkers” (bebedores de pinta de birra), fue ayer como ese regalo inesperado al desesperado, o sea a nosotros, canarios ilustres descendientes de la etnia bereber. Así como los alemanes son altamente predecibles, los destinos del pueblo británico son inescrutables. Las decisiones del más inescrutable aún Boris Johnson, son dignas de ser adivinadas por el profesor Mamadou.Ayer mismo quitaron de su lista negra a Canarias para viajar. Por más que ahora, muchos se pongan las medallas, presumiendo de largas negociaciones que han dado su fruto en arduas reuniones bilaterales, leche de cacharro.El Foreign Office de UK, ha levantado la cuarentena por varios motivos y no precisamente porque el Estado Español les caiga demasiado bien. De hecho, les importamos un web y la mitad del otro.El Gobierno Conservador del periodista B. Johnson, no pudo con la presión. No con la de España por supuesto, ni la de la UE. Eso les importa un carajo. Fue la presión de sus propias empresas turísticas asfixiadas y la del populacho, con ganas ya de sol, cholas, playa y cerveza, lejos del frío de la vieja Londres. Sociológicamente seguro que muchos no han entendido aún que, para un Britano, las vacaciones son tan sagradas como peregrinar a la Virgen de Candelaria.Y gracias a esa flema británica, estúpida hasta cierto punto, vivimos por estas tierras de África. Todavía leía ayer a algún tolete en las Redes diciendo que a ver si iban a traer la 3º Pandemia. No sé, que elijan que Pandemia prefieren. La miseria también mata. Menos mal que las buenas noticias, comienzan a llegar. A mí me alegró el día. Me lo dijeron en medio de una entrevista que le hacíamos en La Radio a Casimiro Curbelo, el presidente gomero, cuyo suspiro de alivio se escuchó allá por Valle Gran Rey.Levantar las cuarentenas ha sido una gran noticia, pero de eso, a haber recuperado los turistas, es otra historia. Ahora falta que ingleses y alemanes pierdan el miedo y se decidan a venir, y sobre todo que aquí tengamos sistemas de control apropiados. Si no, igual que vinieron, volverán a largarse. Pero sí, ayer los “cabezas cuadradas” y los “Pint Drinkers”, nos alegraron el día...y que dure.