Las Torres, en Las Palmas de Gran Canaria, será uno de los principales escenarios de la modificación del Plan General de Ordenación (PGO) en el marco del proyecto Nueva Ciudad Alta. La propuesta urbanística, actualmente en tramitación, contempla la posibilidad de edificar bloques de hasta veinte plantas en parcelas privadas y la expropiación de 127 viviendas unifamiliares, distribuidas en seis manzanas, que serían demolidas para habilitar zonas libres y equipamientos. En medio de esta transformación, surge la pregunta: ¿qué constructoras serán las grandes beneficiadas por este plan urbanístico que ha encendido el debate político y vecinal en la capital?
Tres promotoras, según documentos a los que ha tenido acceso este periódico, concentran la mayor parte del suelo en la zona: Grupo Félix Santiago Melián, Sociedad Inmobiliaria Canaria SA y Avante Espacio Inmobiliaria SLU. Todas ellas verán aumentada la edificabilidad de sus parcelas si el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria —gobernado por PSOE, Nueva Canarias, Podemos y Primero Canarias— aprueba el nuevo planeamiento.
Cambios de alturas
El Grupo Félix Santiago Melián es el principal propietario de terrenos. Dispone de tres parcelas, una de ellas en el límite entre Siete Palmas y Las Torres, donde podrá construir dos edificios de hasta veinte plantas con espacios libres entre ellos, y otros dos en Las Torres, en las que mantendrá la altura de tres plantas en manzana cerrada.

Sociedad Inmobiliaria Canaria SA suma dos parcelas libres en Las Torres, donde la altura máxima pasará de seis a diez plantas, mientras que Avante Espacio Inmobiliaria SLU cuenta con una parcela con antiguas naves industriales que también podrá elevarse de seis a diez plantas.
Expropiaciones, las mínimas
Desde el Ayuntamiento, el concejal de Urbanismo, Mauricio Roque, ha reconocido que “las expropiaciones serán necesarias”, aunque asegura que “se trabaja para que sean las mínimas”. "Lo que sí les digo es que no se va a dar ninguna de las que están recogidas de forma ideal", apuntó el concejal socialista antes de puntualizar que todo lo que se haga "será con la participación de los ciudadanos", añadió.
Sin embargo, José Eduardo Ramírez, concejal del grupo de gobierno municipal que acaba dejar Nueva Canarias para unirse a las filas de Primero Canarias, considera inviable el derribo masivo de las 127 casas. "Las viviendas no se van a derribar por la fuerza social que se está organizando en el barrio", explicó el pasado lunes durante la rueda de prensa que ofreció para anunciar su cambio de formación política.
Oposición
Los partidos de la oposición, Partido Popular (PP) y Coalición Canaria (CC), también critican el plan. El grupo conservador ha insistido en la retirada del expediente. "Ni mentimos ni manipulamos", señaló su portavoz municipal, Jimena Delgado, quien recalcó que "lo que hemos hecho es advertir de una amenaza real y documentada: la desaparición de 127 viviendas del barrio de Las Torres si se sigue adelante con la tramitación de la modificación del PGO en los términos actuales". Para la formación naconalista, por su parte, pide frenar el plan de Las Torres por falta de apoyos: "No tiene legitimidad".

Los vecinos del barrio, organizados en varias plataformas, han mostrado su rechazo frontal. Denuncian que serán desplazados sin alternativas reales de realojo, han convocado reuniones para coordinar movilizaciones y posibles acciones legales contra la iniciativa y se han unido para presentar un recurso contra las expropiaciones.
¿De dónde sale?
Si el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, en boca de su alcaldesa, niega las expropiaciones que el concejal de Urbanismo calibra en las mínimas posibles, ¿de dónde sale el temor de los vecinos? La superficie de las manzanas en peligro está incluida en los cuadrantes de superficies de Espacio Libre de la llamada Alternativa 2, la preferida —entre las opciones que ofrece el PGO— por el consistorio y que establece la desaparición de 127 viviendas de Las Torres —se contabilizan más de 20.000 m2 como Espacio Libre, donde hoy están esas 127 casas de Las Torres—.
La alternativa 2 del plan, elaborada por la empresa pública municipal GEURSA, ha recibido el respaldo del equipo de gobierno —PSOE, Nueva Canarias y Podemos— y cuenta con un informe ambiental favorable, que concluye que “no se prevén efectos significativos en el medio ambiente”.
Las Torres, con una población aproximada de 6.500 habitantes y un tejido residencial consolidado desde mediados del siglo XX, se enfrenta así a una transformación urbanística que combina demoliciones, nuevos desarrollos y espacios verdes, con un debate político y vecinal aún abierto.
