Taganana, al límite de la paciencia con la masificación

El elevado número de personas que visitan la costa y los senderos de Anaga llenan las guaguas en las primeras paradas y los vecinos, mayores y enfermos incluidos, o no pueden subirse o no tienen asiento

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Una guagua llena de personas y la cola para acceder en Taganana a una de ellas /  MONTAJE AH
Una guagua llena de personas y la cola para acceder en Taganana a una de ellas / MONTAJE AH

La aglomeración de visitantes al Parque Rural de Anaga vuelve a crear problemas de movilidad a los vecinos de los pueblos costeros de la comarca protegida. Aunque, mas que volver a crear, se siguen manteniendo y elevando la desesperación de los vecinos.

Luján González, de la Asociación de Vecinos La Voz del Valle de Taganana, ha compartido con Atlántico Hoy una fotografía que refleja los problemas casi diarios que sufren los residentes.

La imagen que vale más que las palabras

En ella, se ve a larga distancia la cola de acceso a una de las guaguas Titsa que conectan la comarca con la zona metropolitana, contrastando con el número de vecinos que viven en la zona.

“La foto lo único que refleja es lo que está pasando a menudo en toda esta zona de Anaga”, avanza Luján. “Masificación de turistas, de senderistas, los que vienen a correr, los que vienen a las guaguas… Digamos que está prácticamente todo copado”, añade con cierto punto de resignación.

Masificaciones

Asimismo, recuerda la ya conocida masificación de las playas en época estival y fines de semana y que cada vez va más gente por los senderos. “Hasta de noche he visto luces en algunos senderos de gente que camina por ahí”, apunta.

En este sentido, habla de la consecuencia de que muchos de los grupos de turistas o visitantes de la zona acaben regresando en las guaguas: “Muchísimas veces” las llenan. “A veces son guías de empresas que venden los paquetes, que vienen en guagua de La Laguna, que llega hasta la zona de la cumbre o a la casa forestal. Se bajan, vienen caminando, después llegan a Taganana, cogen la guagua y por cuatro perras miserables se pasean por todas estas zonas, dejando basura y porquería”, argumenta, molesto, el representante vecinal.

Por ello, González afirma que “el turismo aquí nos da muy pocos beneficios”, agregando que “a los cuatro bares de la zona, restaurantes y alguna casa de alquiler, pero a los demás solo porquería”.

Colas para subirse en una de las primeras paradas en Taganana
Colas para subirse en una de las primeras paradas en Taganana

Guaguas llenas

Con todo, afirma que esa masificación está generando que las guaguas se vean completamente llenas. “Si hay gente mayor del pueblo en la parada siguiente, ya que no todos viven en una zona determinada, cuando van a entrar a la guagua tienen que ir de pie”, espeta.

Asimismo, recuerda que “al revés pasa lo mismo” y explica que “cuando la guagua viene de Santa Cruz, debido a la cantidad de turistas o de gente que viene, cuando los de aquí cogen la guagua en la avenida de Anaga si tienes sitio, tienes suerte”.

De esta manera, Luján deja entrever la poca educación de algunos: “La persona que es joven y que está bien físicamente puede aguantar de pie hasta Taganana, pero, para una persona de 80 años o una persona que esté enferma, venir de pie no puede ser”.

Sin refuerzos adecuados

En este contexto de perjuicio para los vecinos de la comarca de Anaga, González se quejan de que las administraciones siguen sin poner refuerzos adecuados: “Solo ponen refuerzo en el verano si las guaguas se llenan, pero la guagua se está llenando y no se ponen refuerzos, ni tampoco se pone remedio a esta situación poniendo más servicio, que llevamos muchísimo tiempo pidiéndolo. Quizá dos guaguas más al día. Ni caso”.

Sin embargo, critica el representante vecinal que ahora por carnavales se anima al visitante de Santa Cruz a que use la guagua para desplazarse. “Que pondrán más servicio de zonas determinadas, pero en esta zona estamos igual. No nos hacen caso. ¿Qué podemos hacer nosotros? ¿Tirarnos al monte? No es plan”, expresa resignado. “El último recurso es ponerlo en internet y quejarnos”, finaliza.