Vecinos de Añaza no están dispuestos a seguir esperando a que se derribe el edificio de Añaza, conocido como mamotreto, y que tantas vidas se han cercenado en él, según comenta a Atlántico Hoy, la presidenta de la Asociación de Vecinos 8 de Marzo, Mari Guanche.

“Nos vamos a concentrar el día 27 de diciembre en el entorno del edificio, no podemos seguir callados. Queremos que lo derriben ya”, comenta.

Manifestación

Guanche explica que la manifestación tendrá lugar junto al hotel abandonado, a partir de las 17:00 horas del día indicado. “Comenzaremos con un minuto de silencio por Misel, la menor fallecida la noche del pasado 4 de diciembre, soltaremos un globo al cielo y pediremos que se derrumbe ya”, indica.

Recuerda la presidenta que, en lo que va de año, han fallecido 5 personas en este edificio, “la última la niña y, sinceramente, desde el Ayuntamiento de Santa Cruz no se han hecho eco de nada”.

Actitud

Critica la representante vecinal la actitud del Ayuntamiento capitalino y el que se siga postergando la demolición del mamotreto año tras año, “incluso contando con dinero para hacerlo ya, a pesar de las terribles consecuencias que está teniendo el abandono de este lugar”.

Explica que la noche del fallecimiento de la menor ella misma notificó a Carlos Tarife lo que había ocurrido. “Me dejó en visto y me contestó a la mañana siguiente que no se actúa por política, sino que se actúa por ley”, una respuesta que le afectó bastante porque, dice, “la ley se la han saltado para construir un carril bici”.

Piden más seguridad

Guanche se pregunta cuántas vidas más se necesitan para que se tome una decisión que evite que más personas fallezcan por el edificio, sea por la peligrosidad que representa una estructura sin acabar o porque ya se ha convertido en un referente para acabar con todo”.

Cuestiona la presidenta vecinal por qué en lugar de instalar una “mini valla” no han puesto otro método de seguridad que impida el paso de personas al edificio hasta que tengan resuelto el papeleo. 

Demolición ya

Comenta Mari Guanche que se está haciendo referencia a un edificio de 50 años, con licencias vencidas desde hace muchísimo tiempo y en el que se ha matado mucha gente. “¿Por qué no pueden aligerar el derribo?”, pregunta y, añade, “ahora, por ley, si tú tienes un solar te obligan a amurallarlo para evitar peligros, ¿por qué aquí no se ha hecho? La valla que tiene es fácil de saltar y por un lateral se puede pasar”.

“Esto se tiene que tirar ya, no podemos esperar al 2027. Además el dinero para hacerlo está”, insiste. “No va a haber una vida más de por medio esperando a que lo derriben”, asevera.

Buscar soluciones

“Me da igual el partido que gobierne, mi asociación no está politizada y lo que queremos es seguridad para el barrio”, insiste. 

Además, manifiesta que ya no se trata solo de las personas de Añaza y Acorán que se acercan al edificio “a jugar o a lo que sea”, sino que personas desde otros lugares de la isla, con problemas de salud mental, vienen hasta aquí porque lo tienen como referencia de “edificio de la muerte”.

“No se puede mirar para otro lado ni desviar la atención preguntando ahora qué hacía una niña de 13 años ahí. Los adolescentes son como son y no tienen conciencia del peligro como la tienen los adultos. No se trata de buscar responsables sino de buscar soluciones y que esto no vuelva a pasar”, concluye.

Medidas del Ayuntamiento

Desde la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento santacrucero, en declaraciones a Atlántico Hoy, manifiestan que en mayo de 2025, a raíz de las denuncias policiales, se inspeccionó el inmueble y se comprobó la desaparición total de la puerta del vallado y de la señalización de peligro. 

En octubre de 2025,  a requerimiento de la Policía Local, se repuso la señalización en varios puntos. Desgraciadamente, tras el accidente ocurrido el 4 de diciembre, se volvió a realizar una inspección inmediata, detectándose un hueco en el acceso, causado por una rotura del vallado existente, y delimitado solo por precintos policiales.  “Se procede, el mismo día, a cerrar completamente el hueco mediante malla electrosoldada soldada al vallado existente y se reponer la señalización de peligro”, destacan

Actualmente, la Gerencia mantiene inspecciones continuadas del cerramiento en coordinación con Policía Local. Por otro lado, insisten en que "la demolición no puede ejecutarse sobre un inmueble ajeno sin previamente expropiarlo".