Encuentros con música chillout, lanzamiento de “paelleras”, cortes de pelo en directo y masificación de quads y buggies son solo algunos de los usos que está soportando el Parque Nacional del Teide, según comenta a Atlántico Hoy, Jaime Coello, director de la Fundación Telesforo Bravo Juan Coello.
“Esto es un auténtico disparate. Esto es un cachondeo”, repite en diferentes ocasiones a lo largo de la conversación mantenida, subrayando que las prácticas reseñadas están prohibidas por la normativa de regulación del espacio, “pero como la prioridad no es la vigilancia y la conservación de los valores de los espacios naturales, sino favorecer actividades económica y que cada uno haga lo que quiera, esto se ha convertido en el pan nuestro de cada día.
No hay vigilancia
En cuanto a los efectivos de seguridad y vigilancia, destaca Coello que “ni en el Teide, ni en Corona Forestal, ni en muchos de los espacios naturales protegidos hay una plantilla suficiente de agentes”, subraya, matizando que “a partir de cierta hora no hay vigilancia como tampoco la hay los fines de semana”.
“La plantilla de agentes es insuficiente. El Seprona también cuenta con agentes y, de vez en cuando, también se ve a la Policía Canaria”, añade, concluyendo que no cree que se cuente con los suficientes efectivos como para afrontar todo el problema.
Falta de interés
Se queja el director de la Fundación de la falta de interés por parte de los responsables políticos para preservar el espacio protegido. Indica también que este es un lugar que se utiliza para la promoción de la Isla, presumiendo de “patrimonio natural, biodiversidad y demás”, pero no destinan medios suficientes para su conservación y cuidado.
“Creo que les interesa más la explotación económica”, dice. Argumenta el entrevistado que la presidencia del Cabildo y del Teleférico recae en la misma persona con lo que, “a la hora de tomar decisiones, ¿con qué presidenta nos encontramos, con la que favorece las actividades económicas o con la presidenta del Patronato del Parque?”, comenta.
Acciones
Critica, además, que cuando se toman decisiones, la prioridad no es la conservación, por lo que “no hay una rapidez en las resoluciones, no hay suficiente plantilla, el Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) está parado. Y esta gente deja pasar los días y deja pudrir los problemas. Por eso estamos como estamos” .
Comenta Coello que es tal el despropósito que se vive diariamente que se están planteando volver a convocar una manifestación porque, recuerda, “el Teide no es un manifiestródomo, pero sí es un lugar para lanzar paelleras, cortar el pelo a la gente o ir a disfrutar de un chillout”.
Manifestródomo
El pasado 7 de junio, los integrantes de Canarias Tiene un Límite, entre los que se encuentra la Fundación Telesforo Bravo Juan Coello, pretendieron llevar a cabo una manifestación sobre el asfalto de una de las carreteras del Parque Nacional del Teide sin conseguirlo, puesto que no obtuvieron el permiso requerido ni del Cabildo ni de la Delegación del Gobierno.
Por entonces, la presidenta del Cabildo, Rosa Dávila, expresó en la rueda de prensa del Consejo de Gobierno (28 de mayo 2025), que ''el Teide no es un manifestódromo ni un decorado para sus batallas ideológicas'', señalando que la corporación insular pediría a la Delegación que desautorizara la concentración convocada para protestar contra la gestión y masificación del Parque Nacional.
Nueva solicitud
“Cuando se dé el momento oportuno, vamos a volver a solicitar la petición para manifestarnos, porque lo absurdo de este problema es que Dávila arremete contra la Delegación, cuando el Cabildo había recibido un comunicado indicando que quien tiene potestad para autorizar es la propia corporación insular. Así que lo solicitaremos al Cabildo cuando tengamos una fecha consensuada y que nos den el no por escrito”.
No entiende el entrevistado como “se cercena el derecho a la protesta ciudadana por una mala gestión, pero, a la vez, se toleran todas estas cuestiones”.
Quads y buggies
Además de lo expresado, denuncia el representante de la fundación conservacionista y ecologista, la alta concentración de quads y buggies que están ocupando todos los miradores, “con una serie de personajes al cargo, que no son guías oficiales, realizando interpretación de una manera ilegal, haciendo intrusismo profesional y ocupando todo el espacio sin permitir que otras personas puedan hacer uso del mismo”.
Finaliza Coello afirmando que los grupos representantes de las organizaciones ecologistas en el Patronato han anunciado el posible inicio de trámites para la retirada del Diploma Europeo y la solicitud de retirada de la condición de Patrimonio natural por la UNESCO.
“Si no nos hacen caso en Canarias, y en particular en Tenerife, Tenemos que sacar esta denuncia fuera y tendremos que llegar a todas las instancias habidas y por haber para que el Parque sea lo que tiene que ser