Una de las imágenes que resultan más curiosas para los conductores que transitan por las autopistas de la isla de Tenerife es comprobar la presencia de puentes que no tienen ningún tipo de uso.
Desde Ofra hasta Candelaria, en la Isla se pueden encontrar diversos “puentes fantasmas”, o bien porque no van a ningún lugar o porque a pesar de haber sido construidos no están abiertos, terminados, ni disponibles para el paso de vehículos o personas. Ocurre concretamente con los ubicados en la zona de Ofra --al lado del Hospital de La Candelaria-- y San Matías (conexión Ofra-El Chorrillo), así como a la altura de Puntalarga (Candelaria) y en la zona próxima al Polígono de Güímar.
Al menos hay expectativas de futuro para alguno de ellos. A principios de septiembre, y después de una espera de más de 10 años, se daba a conocer que el Gobierno de Canarias había retomado el proyecto de la conexión Ofra-El Chorrillo actualizando los precios y aprobando un nuevo presupuesto de 6,5 millones de euros. Asimismo el Ejecutivo canario anunció que recientemente se había aprobado el expediente de contratación, paso previo a la licitación de las obras.
Conexión Ofra-El Chorrillo
Las obras de la conexión Ofra-El Chorrillo llevan más de una década paralizadas. El consejero de Obras Públicas, Vivienda y Movilidad, Pablo Rodríguez, afirmaba hace escasos días entender “la indignación” de los ciudadanos con este proyecto, aunque insistió en que los retrasos se han producido por problemas como la insuficiencia financiera en el convenio estatal de carreteras o por errores técnicos.
La vía Ofra-El Chorrillo comienza en el Barrio de Ofra, a la altura de la glorieta donde confluyen la Avenida Príncipes de España y la Carretera del Rosario, y termina en el Barrio de El Draguillo, a la altura del enlace con la TF-2. Según comunicaba la Consejería, este expediente de contratación comprende la finalización del tramo B (puente cercano al Hospital) que discurre entre la glorieta Moraditas y la glorieta que permite la conexión con el Barrio de San Matías y la calle El Abandono, así como del tramo C, que abarca la glorieta San Matías y la conexión con la carretera TF-2.
De hecho, vecinos de San Matías denunciaban a principios de 2023 en Atlántico Hoy la situación de dejadez en la que se encontraba la calle El Abandono y la trasera de la montaña de Taco, pidiendo la finalización de este tramo del proyecto, el cual se usa de manera provisional. Fuentes del Gobierno anterior señalaban a este medio que para finalizar el proyecto "había que liquidar la obra hecha para sacar a licitación la finalización".
Candelaria y el Polígono
Por otro lado, la TF-1 es una de las arterias principales de Tenerife, una autopista que desde su construcción ha ido avanzando y creciendo a la par que el número de vehículos que circulan por ella a diario. Su construcción comenzó alrededor de los 70 y tenía, en principio, cuatro carriles. Se fue ampliando poco a poco hasta que en los 90 llegó a los municipios de Arona y Adeje. En 2003 se dio el paso para hacer realidad sus seis carriles.
Hoy en día es habitual pasar por la TF-1 a la altura del municipio de Candelaria y fijarse en dos puentes muy cercanos que no tienen ningún tipo de utilidad. El primero de ellos, ubicado a la altura de la urbanización Brillasol, se hizo durante la ampliación de la autopista. El Día recogía en 2014 que el consistorio pedía al Gobierno de Canarias su finalización. De hecho, el entonces concejal de Infraestructuras, Domingo Ramos, señalaba que era necesario "para el tráfico y para aumentar la seguridad vial".
El caso del que está ubicado cerca del Polígono de Güímar --llamado Lomo del Caballo-- es similar, ya que se trata de una infraestructura de la misma época que no tiene ningún tipo de uso ni conexión a pesar de su ubicación estratégica. A principios de octubre, el Cabildo iniciaba las obras de los carriles directos en el polígono de Güímar para mejorar la movilidad de más de 48.000 vehículos. Durante la presentación del proyecto a los municipios de la comarca el concejal de Obras y Servicios de Candelaria, Jorge Baute, valoró "positivamente" la acción pero dijo que el consistorio "seguiría insistiendo y reivindicando la necesidad de conectar el puente de Lomo del Caballo" el cual tiene proyecto y es fundamental para el municipio, señalaban desde el ayuntamiento.
