El Juzgado de Violencia sobre la Infancia y la Adolescencia de Las Palmas de Gran Canaria ha decretado prisión provisional comunicada y sin fianza para el joven acusado de prender fuego a una menor de 17 años en el barrio capitalino de La Isleta. La causa está abierta por homicidio en grado de tentativa y lesiones, según ha informado este lunes el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC).
El investigado, Abarrafía H., de 20 años y nacionalidad marroquí, ha declarado durante cerca de dos horas ante el magistrado Tomás Martín, que ha acordado su ingreso en prisión tras la recepción de los informes policiales y médicos solicitados el pasado viernes, cuando se prorrogó su detención.
La víctima sigue ingresada
La menor permanece en estado grave en la Unidad de Quemados del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, tras sufrir quemaduras de consideración que afectaron a más del 50% de su cuerpo, durante el suceso ocurrido en la madrugada del pasado 16 de julio.
El incidente tuvo lugar en un inmueble de La Isleta frecuentado por personas sin hogar u okupas, donde se encontraban tanto el detenido como la víctima. Sin embargo, la investigación apunta a que en el interior del inmueble solo estaban presentes la víctima y el investigado, y que el incendio, iniciado en la habitación donde ambos se encontraban, tuvo un origen humano, sin causas naturales ni eléctricas. Según ha trascendido, la joven se había fugado tres días antes del centro de menores en el que residía, bajo tutela del Gobierno de Canarias.
"Un accidente"
Por el momento, no ha trascendido lo que ha declarado ante el juez, pero al comparecer ante la Policía el investigado alegó que lo ocurrido había sido un accidente, al prenderse el colchón sobre el que estaban fumando. No obstante, la Policía Científica localizó un mechero y restos de combustible en la escena, mientras que los informes médicos del Hospital Virgen del Rocío sostienen que las lesiones son compatibles con la ignición directa de líquido inflamable, más que con un accidente fortuito.
El viernes, el juez solicitó más información para saber si dos personas que están en el mismo colchón pueden sufrir lesiones tan diferentes si este se incendia, ya que el detenido solo presentaba una quemadura leve y ni siquiera se intoxicó por humo, de acuerdo con la revisión que le hicieron ese mismo día en el hospital. Al Cuerpo Nacional de Policía, le pidió un informe provisional de sus equipos de Policía Científica para tratar de determinar de forma detallada el origen del fuego y foco de inicio, y a la Policía Local de la ciudad le requirió un atestado completo con declaración de los agentes que intervinieron en el incidente y con imágenes del suceso, si es que existían. Asimismo, demandó información a la Unidad de Quemados de Sevilla para saber si las lesiones de la menor "fueron causadas por vertido de material inflamable" necesariamente, o si, por el contrario, cabía la posibilidad de que la víctima sufriera esas quemaduras "estando acostada en un colchón", sin utilizar un acelerante.
Riesgo de fuga
El juez subraya que la situación irregular del investigado y su falta de arraigo familiar o laboral en España agravan el riesgo de fuga, lo que descarta medidas alternativas como comparecencias periódicas o fianza. Mientras avanza la investigación, se ha solicitado la declaración del personal sanitario y policial que asistió a la víctima, el análisis toxicológico de la menor y la mejora de la calidad de las grabaciones de las cámaras de seguridad.
Abarrafia permanecerá en prisión preventiva mientras se aclaran las múltiples contradicciones en los testimonios y se esperan nuevas pruebas periciales que determinen si el incendio fue provocado intencionadamente.