El Gobierno de Canarias ha anunciado un cambio normativo que permitirá ampliar el número de empresas que prestan servicios de ayuda a domicilio con el objetivo de afrontar la atención de más de 8.000 personas dependientes que, aunque tienen reconocido el derecho, aún no reciben ningún tipo de asistencia.
Sin embargo, esta decisión ha generado inquietud en el sector. Leticia González, presidenta de la Asociación Canaria de Empresas de Ayuda a Domicilio (ACEMAD), considera que el nuevo enfoque pone en peligro la profesionalización y la calidad del servicio que se presta a la población más vulnerable.
Escasez de personal
La intención de la Consejería de Bienestar Social es agilizar el proceso de incorporación de nuevas entidades, entre ellas grandes compañías nacionales, sustituyendo el actual procedimiento de acreditación — lento y burocrático — por una declaración responsable que permitiría a las empresas compensar a operar desde el primer momento.
Para González ese no es el camino y considera el cambio un “despropósito”. “Podríamos llegar al absurdo de que una empresa de limpieza de comunidades, por ejemplo, presente hoy una declaración responsable y mañana esté atendiendo a un usuario dependiente”, expone.
Actualmente, existen 33 empresas acreditadas que cubren todo el territorio canario. González apunta que el problema no radica en la falta de compañías, sino en la escasez de personal cualificado en algunas zonas, especialmente en islas como Lanzarote, Fuerteventura o en áreas turísticas donde el sector hotelero compite por los mismos perfiles profesionales.
Más recursos
El Gobierno justifica el cambio por los largos plazos que implica actualmente obtener una acreditación, que pueden tardar hasta dos años. No obstante, desde ACEMAD se defiende que la solución no debe pasar por eliminar los controles, sino por mejorar el funcionamiento del sistema de acreditación.
“Es evidente que el servicio de acreditaciones necesita un cambio. No es admisible que nuevas empresas que se quieran incorporar al sector estén hasta dos años esperando para obtener la acreditación. Las soluciones deberían pasar por dotar de más recursos a este servicio y flexibilizar los criterios y las exigencias, siempre que se cumpla con lo establecido en el decreto”, insiste González.
Hacer atractivo el sector
Asimismo, la clave para mejorar la cobertura, según ACEMAD, pasa por hacer más atractivo el sector para nuevos profesionales, mejorar las condiciones laborales mediante negociación colectiva y fomentar la formación a través de certificados de profesionalidad accesibles.
“No puede ser que a un profesional de ayuda a domicilio le resulte más atractivo trabajaren un hotel que dedicarse a la profesión para la que se ha formado. Y además de ello, debería fomentarse la convocatoria de cursos a través de cabildos y ayuntamientos para que las personas interesadas en trabajar en este sector pudieran obtener fácilmente el certificado de profesionalidad que les habilita a trabajar en el ámbito sociosanitario”, expone la presidenta de ACEMAD.
Desde la asociación insisten en que su postura no es proteccionista, sino una defensa de la profesionalización y la calidad en un sector esencial para la vida digna de miles de personas dependientes en Canarias.