Montaje de una pistola taser y el incidente ocurrido el lunes en Vega de San Mateo entre dos guardias civiles y un hombre con un cuchillo./ MONTAJE AH
Montaje de una pistola taser y el incidente ocurrido el lunes en Vega de San Mateo entre dos guardias civiles y un hombre con un cuchillo./ MONTAJE AH

Sólo 10 de pistolas táser en Las Palmas y agentes sin formación: "El disparo podría haberse evitado"

Este lunes, dos agentes tuvieron que disparar a un hombre en Vega de San Mateo porque blandía un cuchillo de cocina contra ellos

Álvaro Oliver González, redactor jefe en Tenerife

La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha denunciado en declaraciones a Atlántico Hoy la escasez de pistolas eléctricas inmovilizadoras (táser) en los cuarteles de la Guardia Civil de Canarias y ha asegurado que el uso de una de estas armas habría evitado el tiroteo ocurrido el lunes en Vega San Mateo (Gran Canaria) tras un aviso por violencia de género, en el que dos agentes dispararon a un hombre que los amenazaba con un cuchillo, como quedó registrado en vídeo y ha sido publicado por este medio.

Desde la asociación, consideran que el disparo podría haberse evitado: "Esto no hubiese ocurrido si los agentes hubiesen contado con una táser. El individuo habría sido reducido en menos de un minuto sin poner en riesgo la vida de nadie". La organización lleva más de una década reclamando la dotación de estas armas no letales para los agentes.

Solo una decena de pistolas en toda la provincia de Las Palmas

Según ha confirmado AUGC a Atlántico Hoy, actualmente solo existen unas diez pistolas de este tipo en toda la provincia de Las Palmas, distribuidas entre la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC) y los puestos principales de Vecindario (Gran Canaria) y Tías (Lanzarote). En el caso de Tenerife, la situación es similar, con una dotación total que no supera las 20 unidades en todo el archipiélago.

Además, denuncian que el verdadero problema no es solo la escasez de armas, sino que muchas no pueden ser utilizadas porque faltan cartuchos de prueba, necesarios para formar y habilitar a los agentes. "En el cuartel de Vecindario somos 80 guardias y solo cinco tienen el curso. Si no están en servicio, la pistola se queda en el armario", afirman.

La formación, paralizada por falta de munición de entrenamiento

AUGC explica que el curso para el uso de estas armas sí se imparte en Canarias, pero está bloqueado por falta de cartuchos de prueba, cuyo suministro depende de la Dirección General de la Guardia Civil. “No es un problema logístico, es que directamente no los han comprado”, critican.

Esta situación contrasta con la de otros cuerpos de seguridad. La Policía Nacional dispone de táser en la mayoría de comisarías, y muchas policías locales cuentan con varias unidades activas por turno, asegura AUGC. “En la Guardia Civil, por motivos que desconocemos, no se ha querido dotar adecuadamente a los agentes”, lamentan desde la asociación.

"Esperamos no tener que lamentar la muerte de un guardia civil"

El incidente de Vega de San Mateo, donde un hombre tuvo que ser reducido con disparos al atacar con un cuchillo, ha reavivado el debate. Desde AUGC advierten que situaciones similares podrían tener un final trágico si no se actúa: “Esperamos no tener que lamentar la muerte de un agente en una intervención por la falta de material adecuado. Si eso ocurre, ¿quién sería el responsable: el guardia civil, el agresor o la Dirección General que no da medios?”, se preguntan.

La organización insiste en que las armas eléctricas inmovilizadoras son eficaces, seguras y disuasorias: “Con solo mostrarlas, muchos agresores ya se rinden, porque saben que la inmovilización es inmediata y con una pistola normal no puedes dispararles”.