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Imagen de un Policía Local de Tacoronte. / AYUNTAMIENTO DE TACORONTE

Conflicto en la Policía de Tacoronte: ocho agentes piden que cambien al jefe por otro compañero

En plena guerra abierta, el ayuntamiento señala que el cargo de oficial jefe "no se elige o cambia en función de unas reflexiones o preferencias" de un determinado número de policías

La polémica vuelve a salpicar al municipio de Tacoronte. Primero fue con el caso de la Protección Civil y ahora con el conflicto de la Policía Local. Ocho agentes del municipio (de los 11 que ejercerían actualmente) han remitido un escrito a la alcaldía pidiendo el relevo en la jefatura del cuerpo policial. 

El objetivo, dicen, es garantizar "liderazgo eficiente, transparente y comprometido con las necesidades del municipio". En este sentido piden que el actual jefe, G. Medina, sea relevado por su segundo --el otro oficial que está en activo-- L. A. Castro, por sus "méritos, experiencia y compromiso demostrados". 

Escrito 

El escrito, al que ha tenido acceso este medio, fue remitido el 7 de octubre de 2025 y firmado por ocho agentes. En él se dirigen a la alcaldesa del municipio, Sandra Izquierdo, pidiendo una revisión del desempeño del actual jefe, quien ocupa el cargo desde 2016. Explican que, "sin perjuicio de su dilatada trayectoria profesional" las circunstancias actuales "aconsejan una revisión exhaustiva de su desempeño" al frente del cuerpo. Los firmantes añaden que también "ha habido problemas de comunicación con la concejalía y alcaldía", lo que ha dificultado "la organización de eventos y servicios municipales". 

Según explica a Atlántico Hoy el delegado del CSIF en el municipio, el actual jefe "ha tenido poca o ninguna participación en tareas operativas como detenciones, inspecciones o atestados" algo que habría afectado "a la eficacia del cuerpo, así como ausencia de liderazgo operativo y motivacional". También hace referencia a un "mal ambiente de trabajo" que ha causado que "muchos compañeros hayan decidido marcharse", afirma. A ello se suma, dice, "la mala gestión de recursos humanos y materiales" así como deficiencias "en el manejo de programas administrativos como el Gestiona" que habría "causado caducidades o errores en expedientes". 

Sandra Izquierdo, alcaldesa de Tacoronte. / Cedida

Propuesta

En este sentido resaltan los "méritos, experiencia y compromiso tanto en Tacoronte como en su paso por Las Palmas de Gran Canaria" del compañero que proponen para sustituir al actual jefe destacando su "capacidad de coordinación, liderazgo y colaboración con los agentes". 

Los firmantes apuntan que su designación "aportaría cohesión, eficiencia y estabilidad al cuerpo policial y a la seguridad ciudadana" señalando que "ya ha mostrado esas cualidades al ejercer como jefe accidental (provisional)". 

Años de polémica 

Pero la situación arrastra años de polémica. A principios de 2024, el jefe fue destituido y por parte de la alcaldía se firmó un nuevo decreto que recogía que el cargo de jefe de la Policía Local "se cubriría de forma rotatoria entre los dos oficiales activos del cuerpo por períodos de cinco meses cada uno, hasta que el puesto se convoque y se cubra de manera definitiva". Una decisión que, según el consistorio, se basaba en "informes técnicos y en la necesidad de regularizar una situación que se venía gestionando de manera irregular" desde el año 2016. 

En mayo El Día publicaba que el sindicato Unijepol había recurrido el cese del jefe ante los servicios técnicos municipales. Según el sindicato, un informe técnico posterior les dio la razón declarando nulo ese cese y los nombramiento posteriores. De hecho estudiaban en ese momento denunciar al consistorio "por una posible prevaricación" ya que había trascendido que el oficial que los compañeros han propuesto para la jefatura es pareja de una concejal del municipio. Por su parte el CSIF desmentía "cualquier trato de favor por este motivo" y avalaban "sus 20 años de servicio". Además afirmaban en un comunicado que no descartaban acciones legales si el consistorio le seguía manteniendo como jefe. En plena guerra abierta, el ayuntamiento señala que el cargo de oficial jefe "no se elige o cambia en función de unas reflexiones o preferencias" de un determinado número de policías.