Hace unos años era común salir a pasear por la calle y encontrar varios carteles con letras naranjas de pisos que se alquilaban para vivir. Esos letreros hoy casi han desaparecido. Ahora lo más común es encontrarnos esos carteles pero rojos y para viviendas vacacionales en el centro de las ciudades o en las zonas de costa.
De esta manera, se acentúa, cada vez más, el grave problema de la vivenda en Canarias: más alojamientos destinados al turismo, menos vivienda social y los precios por las nubes.
Un ejemplo de ello lo podemos encontrar en la calle de Manuel Verdugo, en Santa Cruz de Tenerife, donde hay un edificio con 10 carteles de viviendas vacacionales. Sin embargo, en la imagen de Google Maps, captada el año pasado, solo había un alojamiento de este tipo.
47.716 viviendas más en un año
Es suficiente con jugar a buscar las diferencias entre una imagen y otra para comprobar el incremento del alquiler vacacional en el Archipiélago. Según una Estadística Experimental de Vivienda Vacacional del Instituto Canario de Estadística (ISTAC), en las islas hay 47.716 viviendas más respecto al año pasado.
Mientras que los propietarios prefieren que sus viviendas sean para turistas mayoritariamente por motivos de seguridad jurídica, la población local se ve obligada a pagar alquileres cada vez más caros o trasladarse a las afueras del centro de las ciudades.