Los cortes de agua en la prisión Tenerife II podrían tener los días contados. El Ministerio del Interior confirmaba a principios de octubre que el proyecto para ampliar la capacidad de almacenamiento de agua en el centro penitenciario está incluido en el Plan de Amortización y Creación de Centros Penitenciarios (PACEP), y será prioritario con unas obras que comenzarán en 2026.
El anuncio responde a años de denuncias por parte de los trabajadores del centro, quienes han alertado de cortes diarios de agua, especialmente en verano, y de la disponibilidad limitada de agua potable durante pocas horas al día. Según explican, estas deficiencias obligaban tanto al personal como a los internos a recurrir a cubos para lavarse o hacer sus necesidades, mientras que los internos dependían de camiones cisterna que abastecían el centro.
La portavoz de Coalición Canaria, Cristina Valido, formuló una pregunta sobre la situación en el Congreso, y el Ministerio señaló que el proyecto está en fase de redacción. Este incluye la construcción de un nuevo aljibe para el suministro ordinario de agua y otro aljibe específico para emergencias y protección contra incendios.
Sin agua
Durante el gran incendio de Tenerife en 2023, el centro penitenciario se quedó sin agua debido a la rotura de los canales que lo abastecían. En aquel momento se planteó mejorar la infraestructura y crear una canalización exclusiva para el penal, pero hasta ahora no se habían registrado avances.
Tras movilizarse frente a la prisión en agosto de 2025 para exigir soluciones, el delegado del sindicato Tu Abandono Me Puede Matar (TAMPM), Nacho Fernández, explica a Atlántico Hoy que, aunque confían en el proyecto, podrían surgir problemas el próximo verano debido a la magnitud de las obras. Fernández señala que la manifestación de agosto dio resultados positivos, ya que en el Congreso se comprometieron a dar prioridad a Tenerife para iniciar las obras el próximo año. Aunque confían en el proyecto, apuntan que no es la primera vez que les garantizan unas solución sin que se materialice.
Con la vista en el próximo verano
Fernández afirma que, si bien es una muy buena noticia, "no es la primera vez que nos dan luces para hacer cosas desde Madrid y luego no se concretan”. Agrega que, de no llevarse a cabo el proyecto, la prisión podría enfrentar otro verano sin agua y con sobrecupo, afectando la seguridad de los 1.020 internos. Según su experiencia, existe el riesgo de nuevas concentraciones si la obra no avanza, por lo que esperan información adicional antes del próximo verano para asegurar que los trabajos puedan completarse a tiempo.
El alcalde de El Rosario, Escolástico Gil, ya ha expresado en varias ocasiones su malestar por la “deficiente red hidráulica” del centro penitenciario, que comparte suministro con los domicilios del municipio. Gil ha insistido en la necesidad de que el Estado independice su suministro, dado que el ayuntamiento se encarga actualmente de abastecer y sanear esta infraestructura crítica.