Personas paseando por el casco histórico de La Laguna / AYUNTAMIENTO DE LA LAGUNA
Personas paseando por el casco histórico de La Laguna / AYUNTAMIENTO DE LA LAGUNA

Los vecinos del centro de La Laguna se hartan del ruido y denuncian al Ayuntamiento ante la Fiscalía

La Asociación de Vecinos Casco Histórico ha presentado una denuncia ante la Fiscalía Provincial de Santa Cruz de Tenerife por lo que considera “graves incumplimientos en materia de legislación acústica” por parte del Consistorio

Atlantico Hoy

La Asociación de Vecinos Casco Histórico de La Laguna ha presentado una denuncia ante la Fiscalía Provincial de Santa Cruz de Tenerife por lo que considera “graves incumplimientos en materia de legislación acústica” por parte del Ayuntamiento. La medida se formalizó el 31 de octubre y fue anunciada este martes por el presidente del colectivo, Pablo Reyes, según informa el periódico El Día

Según explicó, el grupo vecinal ha agotado todas las vías posibles sin obtener resultados reales. “Denuncias, cartas, asistencia a reuniones, foros y debates, incluso una queja ante la Diputación del Común”, enumeró Reyes. “Pero todo tiene un límite, y el desamparo al que nos vemos sometidos nos ha llevado a solicitar de la Fiscalía que actúe en consecuencia”, añadió.

Reclamaciones reiteradas

El pasado octubre, durante un pleno del Ayuntamiento, Reyes ya había advertido: “Próximamente igual buscaremos amparo en la Fiscalía. Ordenanza del Ruido ya, y que se cumpla”. En ese momento parecía solo un aviso, pero la advertencia se ha concretado.

Desde el consistorio se comprometieron entonces a sacar adelante la ordenanza, aprobada inicialmente en 2023, y a distribuir los actos por distintas zonas del municipio para reducir la concentración de eventos en el centro peatonal.

Sin embargo, la asociación sostiene que el tiempo pasa sin avances reales. “Ante esta falta de respuesta, no nos ha quedado otro remedio que presentar denuncia en Fiscalía y esperar sea atendida nuestra solicitud”, afirmaron los vecinos. Consideran que el Ayuntamiento hace “caso omiso” a sus demandas y que “el cumplimiento de las ordenanzas es inexistente”.

Problema de salud

El colectivo subraya que el ruido puede convertirse en un problema de salud, incluso con efectos psicopatógenos. “Desde nuestra fundación en 2002 trabajamos por la calidad de vida de la vecindad. La lucha contra la contaminación acústica y por un uso racional del espacio público ha sido una constante”, recuerdan.

En las últimas semanas, el malestar del colectivo se ha agravado. Critican que la Gerencia de Urbanismo, a propuesta de la Concejalía de Comercio, Turismo y Restauración, haya autorizado la ampliación del horario de cierre de los locales en determinadas fechas, basándose en el Decreto de Actividades Clasificadas y Espectáculos Públicos.