Se disparan los alquileres fraudulentos en Tenerife

Los estafadores ponen anuncios fantasma en diferentes plataformas y piden el dinero por adelantado para después desaparecer con él

Guardar

El Instituto Canario de Vivienda subvencionará con 400.000 euros para viviendas cohousing y colaborativas / Europa Press
El Instituto Canario de Vivienda subvencionará con 400.000 euros para viviendas cohousing y colaborativas / Europa Press

El número de denuncias por alquileres fantasma ha crecido considerablemente en Tenerife este año, según ha podido contrastar Atlántico Hoy consultando a diversas comisarías y unidades de la Policía Nacional en la isla, si bien la distribución por zonas no es homogénea.

Hace unas semanas, la correduría de seguros Arrenta alertó del incremento de este tipo de estafa y de la usurpación de la identidad de los inquilinos interesados a nivel nacional. En Tenerife, los anuncios falsos de pisos en alquiler son cada vez más comunes, aunque la Policía especifica que no han detectado un aumento en usurpaciones de identidad derivada de estos delitos.

Un 'modus operandi' común

Las unidades consultadas por este medio son la Brigada Provincial de Policía Judicial (BPPJ) -en concreto, el Grupo de Delitos Tecnológicos-; la Comisaría del Distrito Norte de Santa Cruz; la Comisaría Local del Sur de Tenerife, en Adeje; y la Comisaría Local de La Laguna. Todas las comisarías coinciden en que en 2022 se está experimentando un incremento notable, mientras que la BPPJ señala que este año y el pasado no ha tenido competencias en investigación de este tipo de delitos, pero sí ha podido ofrecer una descripción detallada del modus operandi basada en lo observado hasta 2019 y una serie de recomendaciones. Esta descripción es compartida, a su vez, por las comisarías consultadas.

Según explica esta unidad a Atlántico Hoy, la manera de actuar consiste en ofrecer viviendas para alquiler ubicadas en calles céntricas de distintos municipios de de Tenerife y siempre a precios muy económicos. Los anuncios se publican en múltiples plataformas, como Milanuncios, Idealista o Marketplace (FaceBook.) Las oferta un supuesto arrendador que se tiene que ir al extranjero, bien por trabajo o bien por motivos familiares, y necesita a alguien urgente para que cuide de su domicilio, justificando así el precio del alquiler tan bajo.

Una agente de la Policía Nacional ./ Archivo
Una agente de la Policía Nacional ./ Archivo

Piden hablar fuera de las plataformas de anuncios

Para los anuncios, los delincuentes escogen fotos de habitaciones de hoteles, principalmente de Europa del este, simulando así que se trata de una vivienda en muy buenas condiciones. Después, cuando las víctimas les contactan, los estafadores les facilitan números de teléfonos para hablar fuera de las plataformas de anuncios, escogiendo normalmente la aplicación WhatsApp. De esta manera, evitan ser reportados en las referidas plataformas, ya que las mismas no tienen registros de conversaciones de índole delictiva en sus chats.

Durante el transcurso de las conversaciones, los delincuentes solicitan a las víctimas su documentación para el supuesto contrato y uno o dos meses de alquiler por adelantado mediante transferencia bancaria o Bizzum. Estos estafadores, cuenta la Policía Nacional, "utilizan numerosas medidas de seguridad para anonimizar su actividades ilícitas a través de internet y telefonía", y cuentan, normalmente, con una red de intermediarios financieros, conocidos como “mulas”, para recibir el dinero y proceder a su blanqueo, remitiéndolo al extranjero.

Aumento de denuncias en todas las comisarías

"En San Cristóbal de La Laguna, el número de investigaciones por denuncias de estafas inmobiliarias ha aumentado notablemente desde finales del año 2021", explica el Subinspector de la comisaría de este municipio a Atlántico Hoy. Desde la comisaría del sur de Tenerife, aunque los números son más moderados, las estafas también han crecido.

"Se ha observado un leve incremento de denuncias relacionadas con este ilícito penal en comparación con el año anterior, partiendo de que este año 2022 aún está en curso", afirman allí. En 2021, hubo ocho denuncias en el sur de la isla. En lo que va de 2022, ya llevan diez sólo en esta comisaría.

Las cifras en el Distrito Norte de Santa Cruz son, como en La Laguna, muy notables. En concreto, sólo en este distrito y hasta el 5 de septiembre, las denuncias han crecido el 52%, pasando de 19 en 2021 a 29 en lo que marcha de 2022. 

Imagen alusiva de agentes de Policía Nacional. / Archivo
Imagen alusiva de agentes de Policía Nacional. / Archivo

Incrementos en meses diferentes

Las comisarías difieren, eso sí, en los meses en los que son más comunes las comisiones de este tipo de delito. Arrenta, en su comunicado de hace unas semanas, alertaba que septiembre suele ser un mes en el que se dan más estafas, por coincidir con el comienzo de curso y vuelta al trabajo. Dato que, en base a toda la isla de Tenerife y para el refundido de los años 2017 a 2019, la BPPJ confirma: "la mayor proporción de denuncias se registró [entonces] en los meses de agosto y septiembre. Así mismo, y en menor medida, en los meses de enero y febrero".

En Adeje y el Distrito Norte de Santa Cruz, indican que el año pasado fue agosto el mes en el que más denuncias se presentaron. En 2022, parece que el incremento se ha trasladado especialmente al primer semestre del año. Los meses de enero a marzo han sido los peores en el sur, mientras que en la comisaría capitalina indican que han recibido denuncias todos los meses desde que empezó el año, con "un aumento considerable de las mismas [respecto a 2021], siendo los meses de febrero, marzo, abril, junio y agosto en los que más ha habido".

Los anuncios proliferan en redes sociales

Para protegerse de este incremento de estafas, la Policía Nacional insiste en la precaución. "Hay que tener en cuenta que hoy en día el acceso de los usuarios a internet y a las redes sociales es cada vez mayor y se hace desde edades más tempranas. Esta situación conlleva indefectiblemente a que los delincuentes profesionales inmersos en este sector tecnológico vean un 'mercado' de constantes posibilidades", explica la BPPJ.

El cuerpo policial ha explicado a este medio una serie de recomendaciones para no caer en uno de estos engaños. En primer lugar, utilizar páginas web y plataformas reconocidas, tomando las correspondientes medidas de seguridad para evitar el acceso a webs suplantadas o fraudulentas, utilizando las herramientas de la web de la Oficina de Seguridad del Internauta.

Comprobar precios, ubicaciones y usar medios oficiales

Al localizar un piso, los agentes recomiendan comprobar que el precio ofertado se corresponde proporcionalmente al precio medio de los alquileres de la zona. "Como reza el dicho popular, nadie da duros a cuatro pesetas”, dicen desde la BPPJ. Además, realizar una búsqueda de la vivienda por internet, a fin de comprobar si la dirección se corresponde con un edificio o casa y no es una dirección inventada.

Cuando se inicie el contacto con el arrendador, los agentes recomiendan utilizar preferentemente los chats de las plataformas, siendo precavidos en utilizar otras vías de comunicación, ya que, en esos casos, las webs "no se hacen cargo de lo que pase fuera de su ámbito de gestión". Si se opta por hablar utilizando números de teléfono, correos electrónicos o perfiles de redes sociales, la Policía sugiere hacer una búsqueda en internet para comprobar que ese teléfono, email o perfil no ha sido reportado por otros usuarios como estafa.

Vivienda en alquiler. / EFE
Vivienda en alquiler. / EFE

Ver el piso en persona

En cualquier caso, no iniciar ningún trámite hasta comprobar el estado de la vivienda en persona. "De no ser posible, al menos acordar una cita mediante videollamada en el lugar, evitando hacer pagos por adelantado", recomienda la BPPJ.

Una vez alcanzado un acuerdo de arrendamiento, es importante observar que la información del ofertante se corresponde con la persona con la que se ha hablado, así como con los datos del titular de la cuenta bancaria. "No sería lógico que para un mismo piso, la anunciante se llamara María, luego conversemos por whatsapp con Francisco, firmemos un contrato con Juan y la cuenta bancaria sea de una tal Sofía", ejemplifica la Policía Nacional.