La aerolínea Ryanair anunció este miércoles que dejará de operar todas las rutas que mantenía con el aeropuerto de Tenerife Norte a partir de la temporada de invierno. La decisión implica la supresión de seis conexiones nacionales con Alicante, Barcelona, Madrid, Palma de Mallorca, Sevilla y Valencia. Un anuncio que ya ha dejado las primeras reacciones en patronales y asociaciones del turismo en Canarias.
Doris Borrego, presidenta de la Asociación Canaria del Alquiler Vacacional (Ascav), explica en declaraciones a Atlántico Hoy que entre la Ley de Vivienda Vacacional, los precios y ahora este anuncio supone "un varapalo para el sector" turístico en general. El gerente de Ashotel, Juan Pablo González, señala que se trata de una "mala noticia" aunque confían en la capacidad del mercado aéreo para adaptarse rápidamente.
“Hemos recibido llamadas”
Para Borrego se trata de "una mala noticia" que se introduce en los que considera como una tormenta perfecta. "Por un lado tenemos las manifestaciones en contra de la masificación turística, por otro los incrementos de precio de los alojamientos y una Ley de vivienda que a todas luces parece ser que va a reducir la oferta", explica.
Los clientes de las viviendas vacacionales en las Islas, señala Borrego, viajan bastante en aerolíneas lowcost. "Prefieren pagar menos por el vuelo ya que son muchos los que van por libre, porque Ryanair no tiene paquete turístico". A ello se une, según Borrego, que existe una latente preocupación entre los socios. "Hemos recibido llamadas por esta cuestión. Las plazas se van a reducir, y aquí lo pagamos todos", valora.
Esperanza
Por su parte el gerente de Ashotel ha calificado también de “mala noticia” el anuncio de Ryanair de cerrar su operativa en Tenerife Norte, junto al cierre de otras bases en España y la reducción de rutas, algo que "repercutirá en la oferta de plazas aéreas disponibles en el mercado", afirma. Aunque se ha señalado el incremento de tasas de Aena como uno de los posibles motivos, González recuerda que estas afectan a todas las aerolíneas y considera que "podrían haber influido también otros factores" en la decisión empresarial de la compañía.
González subraya que el sector es “muy flexible y elástico” y que el espacio dejado por una aerolínea suele ser ocupado por otras si detectan oportunidad de negocio. En este sentido, la patronal hotelera espera que las consecuencias sean mínimas tanto para turistas como para los residentes canarios, garantizando cuanto antes su conectividad con la Península y otros destinos.
400.000 asientos
La medida forma parte de un ajuste más amplio que también incluye el cese de operaciones en Vigo y el cierre de la base en Santiago de Compostela. Según la compañía, el motivo es el incremento del 6,5% en las tasas aéreas anunciado por Aena para el próximo año, lo que supone 0,68 euros adicionales por pasajero.
En el caso de Canarias, Ryanair reducirá su capacidad en un 10%, con la desaparición de 400.000 asientos y un total de 19 conexiones directas menos entre la península y el archipiélago, que también afectarán a vuelos desde Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote.