"El mercado convierte esta operación en una necesidad competitiva para nuestra naviera. Si esta operación se concreta, el grupo Baleària se convertiría en la única empresa española capaz de dar un servicio integral en todo el territorio nacional y con capacidad suficiente de competir en el nuevo mercado". Son las palabras con las que la cúpula de Baleària se ha dirigido este lunes a sus marineros en una carta a la que ha tenido acceso Atlántico Hoy para anunciarles la compra de Naviera Armas-Trasmediterránea en lo que es ya un acuerdo histórico para Canarias.
La compañía del mar Balear, capitaneada por Adolfo Utor, ha anunciado este lunes un acuerdo de adquisición que todavía tiene que ser admitido por la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia, pero que pone fin a una duradera agonía por saber qué sería de la naviera canaria tras haber superado una profunda crisis gracias a una reestructuración de su deuda y haber flirteado con un grupo de empresarios canarios para una posible compra.
Un pedazo de pastel
Pero Utor no estaba por dejar escapar este pedazo de pastel que llevaba tanto tiempo queriendo comerse. Ya en 2023, el presidente de Baleària mostró, en una entrevista con Cinco Días, su intención de hacerse con la naviera canaria ya fuese en un solo paquete o vendida por mercados.
En aquel momento, los acreedores de Naviera Armas acababan de dar un golpe de timón para hacerse con el control de la compañía cambiando a la familia Armas deuda por acciones e iniciar un proceso de reestructuración para sanear la compañía que se ha culminado muy recientemente con el aval de la justicia al acuerdo.
Durante todo este tiempo, Baleària ha permanecido agazapada, esperando el mejor momento para abalanzarse sobre una presa por la que ha tenido que fajarse. Un grupo de empresarios canarios asociados con la valenciana Boluda trató de hacerse con la parte insular de la compañía por aproximadamente 160 millones de euros, pero la oferta de la naviera de Utor, que incluía el paquete del mar de Alborán y varios millones más ha decantado la balanza en su favor.
Una compra estratégica
La compra de Armas se torna ahora en una pieza estratégica para Adolfo Utor. "Este proyecto de consolidación en el sector naviero de cabotaje en España, si se concretara, adquiriría un significado especial y estratégico en momentos donde los procesos de concentración han sido una constante en el plano internacional (...). En el nuevo mercado marítimo de cabotaje nacional, son ya cinco los grandes grupos multinacionales que operan en España, todos ellos de un tamaño superior a la actual Baleària con una gran potencia y con una capacidad financiera superior", explica la misiva.
El documento añade: "Los tráficos de cabotaje nacional con las Islas Canarias, Ceuta, Melilla y las Islas Baleares son considerados por la ley como tráfico de interés público. De ellos depende la conectividad marítima de pasajeros, sus vehículos y el suministro regular de mercancías rodadas. La vertebración y cohesión de todo el territorio nacional español no se entiende sin unas conexiones marítimas de calidad, modernas, frecuentes y regulares. Papel que estamos asumiendo desde hace lustros y que estamos dispuestos a seguir asumiendo en todo el territorio nacional de forma integral".
Compañía española global
La importancia de la compra cala en toda la empresa. Baleària avisa a sus marineros: "Todos tenemos que prepararnos para esta trascendente responsabilidad y afrontar este importante reto, que supondrá ganar en tamaño y competitividad. Si finalmente conseguimos cerrar la operación, los equipos de Armas Trasmediterránea junto a los equipos de Baleària tendremos que hacer posible la consecución de una compañía española global, capaz de dar respuesta a las necesidades de todos los territorios, compitiendo eficazmente con los potentes actores navieros internacionales ya establecidos en España".
Con este paso, la compañía de Utor se prepara para sentarse en la mesa de los más grandes, consolidándose como el grupo naviero más grande de España y, aunque aún bastante modesto a nivel internacional, tocando a sus puertas. Tras la compra, 15 buques de Naviera Armas y sus 1.500 empleados pasarán a pertenecer a Baleària.