No es una frase. No es un eslogan. No es una ocurrencia para poner en una camiseta, ni un claim para adornar un PowerPoint. “Para que las cosas sucedan” es, para quienes estuvimos ahí desde el principio, una promesa íntima
Su regreso al barrio me recordó mi etapa como barrendero y el valor de todas esas profesiones que, sin focos ni aplausos, mantienen en pie nuestro día a día
Cuando somos jóvenes, y no tan jóvenes, tendemos a pensar que la vida es una especie de bufé libre en el que todo está a nuestro alcance si tenemos suficiente hambre, talento o valentía
Hay noticias que no se escriben. Se atragantan, se quedan en la boca, se estrellan contra el pecho como un golpe seco. El fallecimiento de Iñaki Domínguez Paniagua fue una de ellas
Hay cosas en la vida que uno no espera que se conviertan en importantes. Cosas pequeñas, casi insignificantes, que de pronto adquieren un peso que no puedes ignorar
Había confiado ciegamente en alguien que pensé que entendería mi visión, mi propósito. Delegué no solo responsabilidades, sino también mi confianza, y esa confianza fue traicionada de la manera más silenciosa y devastadora posible